Como dos seres que en una sala oscura coinciden, que se van conociendo mediante la textura de su voz, de su vibración, mientras se dejan llevar por el soplo eterno; nuestros autores se han encontrado en un rincón del tiempo, en algún universo, en un hecho mágico sincrónico que hace confluir la afinidad sensible. Y tú que lees estas líneas eres ya parte integral de ese hecho trascendente, en esa sala oscura de loops eternos. Así irrumpe una voz dual que porta muchas máscaras, que ocupa cuerpos y matices sonoros múltiples, y que te invita a conocer su cosmos de lírica y narrativa, de luz y oscuridad, de sueños y memoriales, de historias.

Por si no lo sabías, compilación de poemas de Ana Segovia, es una invitación al arrobamiento. Una voz con fuerza, con experiencia, con “cosas qué decir” nos toma de la mano y nos conduce por senderos de vida, de anhelos y recuerdos. Los zurcidos invisibles, de Abraham Téllez, es una selección de cuentos que te aventuran al mundo desde la mirada femenina, donde las mujeres marcan el paso con su hermosa y simple complejidad, donde sufren o gozan esa sucesión de acontecimientos que llamamos vivir. Así nace esta publicación, botón que orgulloso y pleno florece para ser a través de sus lectores.